Prometo la primera mirada al despertar,
organizar ritos en nuestra vida y
reconciliarnos con lo que alguna vez rechazamos.
Prometo lo enigmático, lo soluble...
amarte con una libertad entendida y
con la capacidad de elegir a que cadenas atarnos.
Prometo mis formas resolverse dentro las tuyas
haciendo estallar nuestra ilusión demasiado bella
acontecimiento puro, seductivo, estético...
Prometo reconocer tu verdadera apariencia
sin formas soberanas de la ilusión
y correr el riesgo a encontrar lo que no quise pensar.
Prometo llevar zapatos cómodos y viajar
a donde el aire de la vida limpie los recuerdos
pues ningún lugar será suficiente regalo para mi curiosidad.
Yo, la que te escribe, desde el otro lado del sol
prometo enamorar tu prolongación de vida
devolver más de lo recibido y un viejo libro vuelto a leer.
Bienvenida tu mi realidad, la última de mis ilusiones
no dejaré romperte a ti misma
con el frío analítico de la lejanía ni la endulzada rutina de la vida.
Keine Kommentare:
Kommentar veröffentlichen