Por siempre te quedarás
sin darte cuenta
que el deseo de unión
lo llevas entre las venas
en cada célula de tu cuerpo
en cada manifestación lunática
de tu espíritu aventurero.
Entérate que existen lazos
amárrate a la vida y vive tu muerte
entrégate al tiempo y muere eterno
ánclate al presente sin temer
que la torre de Babel acabe
por desmoronarse en tu vientre.
Amárrate en todo caso a lo humano
sin dejar a un lado lo divino
oscuridad, luz, dolor y euforia
todos meros delirantes de vida
únelos y obsérvalos bien
para que no insistas más en separarlos.
No olvides pues, que cuando mueran
todos los seres vivos los caminos
acabarán aullando, sedientos de huellas...
Y tú, oliendo el sudor agrio del marque no te abraza remas solo.Tú y el lago dormidos al mediodíasobre el lecho de sus hombros.Tú y el antes de la luna que surge de tus dedos pálidos.Tú, conteniendo todas las gamasdel lienzo al atardecer del valle.Tú, tú , tú y la verdadera prisión del almalos muros de montañasy sus ventanas de nubescon su fosa al rededor de todoy al lado una tienda de artedonde te espero impaciente leyendobajo la amarillenta luz eléctrica.
Conjugado a medio día:
te extraño, me extrañas
nos extrañamos...
pregúntale a ese hombre
si el camino es el mismo
detente y mírale;
le quitas el sombrero
yo lo detengo en mi vientre
él escucha mis gruñidos,
alargas tus brazos por fin
y el hombre suelta su llanto
mis manos de viento le quieren atrapar
y el sombrero cae al suelo,
tu acaricias el pelo negro del hombre
y le rozas la nuca como un consuelo
no te mueves ni dejas de mirarle más,
el hombre te abraza y pide perdón
le das tus hombros, llega el atardecer
y solo les queda el recuerdo
yo sigo correteando el sombrero.
Como si entendiera
que en la penumbra
el dolor es menos visible
corre las cortinas cada noche
En la sombra haciéndose viejo
olvida las cosas pues
allí no es necesario disimular
donde no está más su sabor
y su único escape es el ruido
de enormes camiones
que atracan por la madrugada
cargados de legumbres,
huevos, flores, cervezas.
No está más en sus lugares
en la transparencia fría del invierno
ni en la meseta del sol en reposo
sin transición su luz ha renunciado
a la inquietud y se levanta
en polvos de oscuros remolinos.
Para mi poeta lobo ausente que se pierde en sus rutinas
Culmina así su obrafrustrando a la naturalezadonde el crimen es posibley el pecado cosa real.Culmina cambiando el cursode las estrellasalejando hacia atrás los tiempos del mar,cambiando las costumbres de "su mundo"y localizando la casa de "su vida"para destruirla.Culmina lo aún creído lo arrebatado al vientoy a su viejo aparato de las ilusionesconcentrándose en recuerdos parciales y aislados hace correr entre las manoslas imágenes quebradizasy la lenta sucesiónde cuadros amarillentos que relataron en cinco pinceladasla historia de sus fantasmas,de la razón y su locuray las pesadillas como la única verdad de su existencia.Culmina pues, para completar su realidad truncada.
Pensaba en tiy en la poca importancia que tiene ya morir.Pensaba en que no soy másaquella que compraba vestidosen Constanza para correr al mar.Pensaba en todos los díasde luna llena que me tocaríasla dureza cilíndrica de mi vientre y la marea alta lamería mi busto.Pensaba en el después de las cenassólo de nosotros dos dondeyo me desdoblaría saliendo sin decir a dónde iba y túme seguirías, porque desde siemprehabías aprendido que siguiéndome no te perderíasni en tu propia ciudad.Pensaba en el antes, ese ahora distintoquizás sólo porque yo no estaba allíporque entonces habríamossalido a caminar tomados de la manosin fiebre , despacio...muy temprano y nos meteríamos al bosquea donde dicen los lobos matana donde dicen los corderos muereny encontrarnos cada uno cara a cara con su destino
Cristina BellerDe nuevo el peso sobre estos huesos mal nacidos,el peso del frío que acarrea fantasmasy yo mal envuelta en una sabana arrugadaoyendo como siempredesde lejos el canto de antiguos lobos. Perdida en una fatigaque debería ser la felicidadme horroriza la posibilidadde escribir y temerlo que no hago yo misma,la indecencia de presentar este horror solo para que otros digangracias Dios mío porque no soy como este monstruo que acabo de ver.