Dienstag, Februar 14, 2006

Luna mía















Naces de la noche y del miedo
crujes, vibras, mojas
y gateas por lo que eres.
Respiras tras tus pasos
repasando la memoria
para que tal vez alguien más
se acuerde de ti.
Quieres resucitar del tiempo perdido,
transpirar la larga espera
y apaciguar estas ganas de él.
Luna no duermas que no estás sola
dos soles te acompañan
en cada osurecer palpitante y cotidiano.
Lucha contra la poesía emocional
de ti mísma y no olvides
que el lugar sagrado especial no existe.
No duermas luna y menos
en sacrificio involuntario,
sigue fluyendo como rerecien nacida
y no abandones tus luceros.
No puedes creer más a ciegas
debes saber lo que le pasa a tu fe
cuando la pruebas,
y tenerle sin creer en ella.
Si de tus muslos desnudos
sólo cuelga el recuerdo luna
abrelos a tus soles
para que brillen por ellos
y delineate cada vez ante sus ojos
para que te des cuenta que eres irrepetible
sin llegar a maldecir
el romantisismo y la razón
ni dejar que la tristeza te hiele el cerebro.

Keine Kommentare:

Kommentar veröffentlichen